La imagen social del Cádiz del XIX.

En uno de los proyectos Profundiza de este año de Ceip La Barrosa, bajo la coordinación de Juan Carlos Domínguez Pérez, tratamos de reconstruir cómo era la vida diaria en Cádiz mientras sucedían los acontecimientos que políticamente este año celebramos a través de su Bicentenario.
Lejos de Las Cortes de Cádiz , una población se enfrentaba al diario problema de sacar adelante a sus hijos o, en el otro extremos social, hacer valer sus privilegios. Quién era quién, cómo eran, cómo vivían, e , incluso, a qué jugaban, con qué juguetes y a qué cantaban son preguntas que se han hecho nuetsros alumnos y a las que ellos mismos han respondido a través de sus contribuciones personales al Libro Digital del Cádiz del XIX; su imagen social.
El Proyecto lo realizaron alumnos del centro del tercer Ciclo de Primara: María Zafra Lara, Andrea Castaño Aragón, Kelsey Cox, Isabel González Campaña, Diego MOra García, José María Sánchez de la Nieta, J. Iglesias Valera y Ángel Sánchez Piña (de 5º), además de Guillermo Espada Correa y Alberto Ramírez Prián (de 6º).
En la primera fase, apoyados por el coordinador, y organizados en grupos, los alumnos han rastreado los fondos bibliográficos públicos digitalizados, gracias a los que han podido diseñar su propia contribución a este libro digital. Han sido , pues, ellos mismos los que han perfilado los distintos capítulos de éste libro a partir de sus intereses personales.
Ya en la segunda fase, a partir de febrero, se han empezado a organizar los fondos documentales a los que hemos podido acceder con el fin de elaborar entre todos nuestra propuesta propia de reconstrucción de la vida cotidiana del Cádiz del XIX. Es así como han surgido sus lecturas personales de quiénes eran estos gaditanos (mayores y niños) que vivieron en el tiempo de la constitución, cómo vivían, en qué condiciones, cómo vestían, cómo eran sus casas, a qué jugaban... hasta poder diferenciar las dos tristes realidades de la época ,marcadas y condicionadas por las profundas diferencias sociales.
Por fin en la tercera fase, realizada a partir de abril, se ha empezado a definir el capítulo de cada grupo y/ o alumno(según los casos) de tipo temático en dos posibilidades complementarias: a través de un documento de texto montado en formato digital; y también a través de una presentación audiovisual en formato similar.
El resultado ha sdo una significativa galería de imágenes explicadas, reales, cotidianas, de un valor plástico y formativo impresionante, y decididamente contundentes por si valor social. Se trata de una humilde pero interesante contribución al Cádiz del Bicentenario y, sobre todo, un recordatorio de la situación social de la época, la pobreza, la incultura y el abandono en que se hallaban nuestros ancestros debido a las condiciones del Antiguo Rñegimen, a la vez que una forma de esperanza(no siempre materializada) visible en la llegada de los primeros adelantos técnicos(el ferrocarril, el automóvil, la maquinización de las fábricas...) , pero también del coste social que estos adelantos supusieron. Sin duda, un siglo"en blanco y negro".